La iniciativa surgió de un grupo de ex presos políticos que estuvieron recluidos en el antiguo establecimiento carcelario, que formaron la Comisión pro Sitio de Memoria en el ex Penal de Punta Carretas y después de la aprobación de la instalación de una marca de la memoria según resolución de la Comisión Especial Ley 18.596 del 16 de julio de 2018.
Sobre el Proyecto
Somos animales con memoria, por tanto, animales con la capacidad para contar historias.
El proyecto enfoca el homenaje a las familias de los ex presos políticos, quienes durante años acompañaron los procesos de encierro y acudieron rutinariamente a las visitas, en busca de una sanación imposible e inevitable para ambas partes. Es así, que la propuesta toma la idea de la ‘’mesa de visita’’ como dispositivo simbólico, capaz de condensar el vínculo entre ambas partes, entre el preso y su familiar, entre la libertad y el encierro, entre el adentro y el afuera. Esta mesa de visita, se ubica en sitio y modifica su escala doméstica para proponer un equipamiento de escala urbana, capaz de recibir visitas y habilitando escenas cotidianas, comidas, reuniones y eventos, un dispositivo singularmente integrado al paisaje, que amplifica, unifica y cobra protagonismo desde el usufructo del espacio público.
La mesa, ha funcionado a lo largo del tiempo como un dispositivo de narración, de anécdotas... que hacen de ella un campo comunicacional potente, donde puede coexistir lo público y lo privado, lo domestico y lo territorial.
Las premisas de proyecto parten de la simpleza constructiva. En tal sentido, la intervención apunta a una síntesis de muy pocos elementos confeccionados “a medida”, que buscan tener con el mínimo esfuerzo el mayor alcance. La mesa, se conforma por dos placas metálicas colocadas en ‘’T’’, un plano horizontal y su apoyo, generando una mesa extruida de 22 metros de largo, color negro mate, que presenta en su superficie en relieve el listado de más de 800 nombres de los ex presos políticos.
* Extraído de la memoria de los arquitectos