“En tiempos de pandemia, Ana, una apasionada por la botánica, específicamente por las orquídeas, vuelve su hobby un emprendimiento: Greenhouse Orchid, y nos hace el encargo de un invernadero que oficie a la vez de exposición. La propuesta es un prototipo transparente, transportable, modificable y que genere el clima necesario para la supervivencia de las orquídeas. Se fabrican dos, uno de exposición y otro de florecimiento.
Las orquídeas requieren un microclima dentro de un margen muy específico. El entorno debe controlar temperatura, iluminación, humedad, ventilación, riego y nutrientes, más allá del clima exterior.”
*Extraído de la memoria de los arquitectos.