Hitzig & Militello arquitectos

Diseñar experiencias es para Hitzig Militello  una búsqueda espacial cargada de intencionalidades que introduce la interdisciplinaridad desde el día cero.  Arquitectura, sin embargo, que parte del objeto para “construir” una interioridad decorativa plena de identidad y significados.

“Debemos construir la decoración, no decorar la construcción, es fundamental entender esto”.

En Goodsten la alegoría de la “piedra preciosa” fue la generadora de todo el sistema constructivo apoyado en una monomaterialidad sintética de morfología plegada y continua. Una intencionalidad que atraviesa todo el sistema compositivo, desde  las texturas, la iluminación, el  branding  hasta los propios procesos de producción de los prostres.

La mistura de climas y sensaciones linkea en Mamba bar el paisaje onírico con la comida fusión. El diseño del espacio y la organización funcional se traducen en una única pieza comparable con un plato de comida que por combinar sabores no altera el resultado final. Una sucesión de escenas que comienza con el llamado de atención del escaparate en el acceso, prosigue con el paisaje interior de figuras abstractas y finaliza en el jardín posterior verde que hace de telón de fondo.

“En nuestra experiencia hemos implementado un proceso creativo que parte de disparadores de imágenes múltiples y llevamos esto a la abstracción más pura conjugando elementos que representen estos disparadores. Tomamos el proyecto en foja cero y trabajamos desde un stroytelling.”

Objetos detonantes de una idea, piezas constructivas que  descontextualizadas de su función original provocan un sinfín de cuestiones. Desde el momento que se pone en crisis el elemento cotidiano,  se comienza a componer arquitectura.